miércoles, 14 de mayo de 2008

Ciego que saboreas paisajes
Sordo que hablas calandrias
Niño que extirpa día a día
Viento que seduce olmos
Sangre desquiciada
Desesperación contenida = subversión ante el infinito
Acuario de sirenas
Fijación oral
Malicia que destruye estrellas
Luz que viaja a tal velocidad
Ráfaga alucinógena
Desierto de miel y canela
Dunas abyectas
Gota visualmente armonizada en la quietud de un lago
Guerrero del sol
Suavidad transgresora que deleita
Tacto digno de un desahuciado insaciado
Eyaculas dulce de pupila
Temblor turbulencia sacudida
Asesinato

martes, 13 de mayo de 2008

Saludos lejanos

Tan lentos tus ojos que se derriten como el sol cayendo. Un instante, una eternidad se suspende en lo inenarrable, el paso del espacio tomaba liquides mientras tu yo nos abrazábamos
No somos la nada
Somos aquel grito callejero y exagerado que algunas ves detonamos, vamos viajando en lo lejos, nunca se repetirá.
Nadan nuestros besos lisérgicos por todos los océanos, tus caricias y las mías hicieron historia en la arena con las huellas que tu cuerpo y mi cuerpo dejaron grabadas.
Todo existe en forma de eco, resuena hondo el temblor de nuestros odios, palpita duro el ahogo constante de tu imagen, de tu vos, de tu execración y mi llanto magro. Nos quedamos en las sombras, en los rincones, en el vago andar de dos amantes muertos, en las horas que chorrean las ventanas y gotean las paredes y las calles del centro, nos quedamos en el recuerdo de un borracho, en la mirada de tantos, en el pensamiento de nosotros mismos, en lo mas lacerado de nuestros corazones, en el miedo, en la decepción. Estamos en lo inevitable para evitarnos, en lo último que hubiéramos pensado si estuviéramos juntos, andamos lejos de lo que fuimos y de lo que jamás ninguno volverá a ser.

Nos ira mejor o peor, eso es obvio, pero igual jamás.